

PONENTES

Olga González Valderrama
Me llamo Olga y me encanta el Tarot y el cine. Los 20 años de profesión en el mundo sanitario, concretamente en el laboratorio de urgencias hospitalario, no me alejan del mundo arquetípico y nutrido que el Tarot me ofrece.
Estos dos mundos tan dispares, son absolutamente complementarios en mi.
Y la tercera dimensión añadida a estos dos escenarios me la dio el cine. Tras una infancia muy abstracta, donde comprendía conceptos que no podía explicar debido a la corta edad que tenía, pasé una etapa madurativa donde todo empezó a encajar cuando entendí que podía unir lo abstracto y lo concreto como el “Mago del Tarot de Rider” con sus brazos verticales señalando al cielo y al suelo, y también manejar los tubos de ensayo en mi mesa de laboratorio, como el “Mago de Marsella” en su mesa de tres patas.
No dejo de aprender Tarot, es inconmensurable. El Tarot para mi es sobre todo una maravillosa manera de adentrarse en uno mismo.Si miras a tu alrededor todo puede ser interpretado desde estas maravillosas cartas que abren consciencia desde el respeto y el amor
PONENCIA:
“Todo es magia para todos menos para el mago: El viajes desde el caos, hasta OZ ”
En esta ponencia explicaré cómo pocas historias como “El Mago de OZ” representan de una manera tan detallada y profunda la figura del Mago y los Arcanos Menores que él gestiona.
La trama da comienzo en un escenario de involución y caos, donde todo es monocromático (la película comienza en color sepia) y tras una gran catarsis representada por el necesario huracán que todos hemos de experimentar, aparece la dualidad y con ella la imprescindible sombra, acumuladora de una energía invisible.
Una vez presentada la dualidad con su correspondiente sombra comenzará el periplo en el que los Arcanos Menores en forma de compañeros de viaje, se irán transformando desde la energía etérea de As de cada palo, hasta la figura del Rey, coincidiendo con el encuentro de la persona aparentemente más sabia de Oz, que casualmente es un “Mago”, al que piden audiencia los cuatro palos cerrando así el círculo que ha dado vida y maduración a las 56 energías menores.